Por Carlos F. Imendia . Una historia.
Caía el sol , los rayos de la tarde trapasaban el follaje, sobre la cordillera, la faena de extraer Bálsamo acababa, y Rubén Gonzalo y Ananías bajaban de las alturas de los árboles, con el peculiar tufo ahumado, mientras descendian, sus pies hacian tronar las hojas, pudieron encender los mecheros para espantar los zancudos, mientras llegaban al pozo y jalaban agua para lavarse y marcharse limpios a casa, cargando tambien en sus mochilas, la indumentaria y las herramientas del trabajo , ambos hombres, no pasaban de los 30 años, mienrtas caminaban por veredas que ya se oscurecian, hablaban sobre aspectos que atizaban el terror, como los espantos que podian asustar en los caminos y confundir a los caminantes, como algunos que en específico engañaban a los borrachos y los asustaban jalandolos y pellizcandolos hasta que estos caían en precipicios y morian. O aquellos que se confundian en veredas oscuras y eran llevados a las cuevas en sus interiorores, o los duendes espantosos sentados en finas ramas que chiflaban a los caminantes tambien para confundirlos. Rubén y Ananías los campesinos que extraían balsamo sabian que la zona estaba llena e leyendas y cuentos que era interesante recordar volviendo a casa. En el camino, pues podían ver sombras pero que eran de animales propios de la zona, inclusive podian divisar el escurridizo gato Zonto, Ananías le decía: Gato tonto, pero ese felino lo que menos tenía era una pisca de tontera. Ancestralmente era respetado por su aguda vista, su cuerpo aerdinnamica capaz de correr a gran velocidad en medio de los matorrales pero sin hacer el minimo ruido, su sombra negra rapida como una bala que va de arriba abajo. El gato zonto, es un animal, que algunas comunidades lo ven como diabolico, y como Rubén lo asocia con desgracias nocturnas, pero porque es un animal que aparece cuando uno menos lo imagina, como un espanto, como un nahual, de las muchas historias que en Mesoamerica se cuentan de brujos o hechiceros que tienen la habilidad de transformarse en animales y escapara. El gato zonto, dice Ruben , hace algo que perturba a muchos en el sielncio de la noche, cuando el relón ya casi llega a las 3:00 A.M. en la oscuirdad, en la quitud de la planicie, en lo zacatales, el Gato zonto grita y pega alaridos como gente, y el sonido se expande y genera con su eco un terror desedido, que pareciera ser el grito de una bruja enfadada, pero no, es el llamado del gato zonto, que quizas lo hacer para llamar a una hembra y aparearse, quizas algunos , como Ruben lo explica, en alguna borrachera o bajo los efectos de la marihuana, escuchan los sonidos mas fuertes y los hacen entrar en terror.
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